River busca la remontada en Brasil ante Palmeiras por la Copa Libertadores

River Plate se juega gran parte de la temporada en el cruce de vuelta contra Palmeiras en San Pablo. El partido, correspondiente a los cuartos de final de la Copa Libertadores, se disputará mañana en el Allianz Parque. Desde Brasil, el periodista Luciano Castañares realizó una cobertura en vivo para Fuera de Juego de Canal 10. La transmisión incluyó un extenso análisis junto a Jota Urchevich y Noelia González, conectados desde Tucumán.

Durante su intervención, Castañares señaló que el equipo de Marcelo Gallardo enfrenta una presión enorme. “Mañana está claro que River en cierto punto se juega gran parte del año”, explicó el periodista en referencia al armado del plantel. Recordó que la delegación partió desde Buenos Aires con demoras, y que la llegada a San Pablo coincidió con la expectativa de los hinchas.

El enviado especial remarcó que los refuerzos millonarios todavía no alcanzaron el rendimiento esperado. “Kevin Castaño, por el cual River pagó 14 millones de dólares, todavía no ha dado muestra de ser una solución”, opinó. En esa línea, repasó los casos de Montiel, Martínez Quarta, Pezzella y Nacho Fernández, marcando bajas de nivel sostenidas desde su llegada.

Castañares también hizo hincapié en la responsabilidad compartida entre entrenador y futbolistas. “Cuando las cosas van bien es gracias a Gallardo y cuando las cosas van mal es culpa de los futbolistas”, advirtió. Planteó que este cruce con Palmeiras será además una prueba de carácter colectivo, que pondrá a prueba jerarquía y mentalidad.

Finalmente, se refirió al posible once titular, con dudas en mediocampo y ataque. Destacó que Armani se mantendrá bajo los tres palos, con Montiel y Martínez Quarta entre los defensores. Señaló además que Juanfer Quintero y Nacho Fernández pelean por un lugar en la creación, mientras que Borja y Salas aparecen como alternativas ofensivas. “Mañana seguramente tenga mayores precisiones sobre la formación definitiva”, adelantó.

La previa mostró movimiento en el hotel de concentración, a la espera del arribo del plantel profesional. Entre expectativas y cuestionamientos, River afrontará una final anticipada que podría definir no solo su futuro en la Copa Libertadores, sino también la continuidad de su proyecto deportivo bajo la conducción de Gallardo.

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