La policía detuvo a usureros que atacaron a un comerciante

La policía detuvo a dos usureros que amenazaron a un comerciante y le sustrajeron bienes de alto valor en Banda del Río Salí. El caso avanzó luego de que la víctima decidiera denunciar las agresiones recibidas durante los últimos meses. Además, los investigadores desarrollaron tareas que permitieron establecer la ruta de los objetos robados y localizar los puntos donde operaba la organización. De esta manera, la Unidad de Investigaciones Criminales y Delitos Complejos ejecutó una serie de medidas que derivaron en la aprehensión de los acusados.

Los agentes iniciaron la causa cuando el comerciante explicó que había solicitado un préstamo informal de dos millones de pesos y debía devolver dos millones ochocientos mil pesos al finalizar el plazo. El hombre relató que no pudo concretar el pago y los prestamistas reaccionaron con amenazas directas en su taller mecánico, donde ingresaron con armas de fuego y se llevaron dos motocicletas valuadas en siete millones de pesos. Luego, según el denunciante, los mismos sujetos regresaron y retiraron un autoelevador estimado en otros siete millones. Ante ese relato, el comisario principal Miguel Morantes señaló: “Recibimos la denuncia de un comerciante de Banda del Río Salí, quien manifestó que meses atrás había solicitado un préstamo informal de $2.000.000, y tenía que devolver $2.800.000. Al cumplirse el plazo, no pudo afrontar el pago”. 

Tras esa declaración, la policía reconstruyó cada visita realizada por los prestamistas y analizó las amenazas sufridas por la víctima, que incluyeron advertencias vinculadas a una posible represalia si presentaba una denuncia. El comisario Morantes agregó: “Ante esa situación –continúo– los prestamistas se presentaron en su taller mecánico y, mediante amenazas con armas de fuego, le robaron dos motocicletas valuadas en un total de $7.000.000. Días después regresaron y le sustrajeron un autoelevador valuado en otros $7.000.000, además de amenazarlo de muerte si llevaba a cabo una denuncia. Por la gravedad de lo sucedido, la víctima finalmente decidió denunciar”. Con esa información, la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos N.°2 autorizó medidas judiciales.

Los efectivos realizaron allanamientos en Banda del Río Salí y en la Capital, donde reunieron objetos relevantes para la investigación. En esos procedimientos, los agentes secuestraron dos automóviles, dinero en efectivo, dos escopetas, una pistola, un revólver, dos celulares, un DVR y varias municiones. Los investigadores detectaron que dos armas no tenían numeración, situación que deberá analizar la fiscalía. Además, los policías hallaron el autoelevador robado, que estaba en otro taller mecánico tras haber sido vendido por los autores.

El comisario Morantes señaló al finalizar las tareas: “En los procedimientos, los agentes aprehendieron a dos personas y secuestraron dos automóviles, dinero en efectivo, dos escopetas, una pistola, un revólver, dos celulares, un DVR, y municiones. Dos de las armas no tenían la numeración. Asimismo, recuperaron el autoelevador, que ya había sido vendido a otro taller mecánico”.  

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